lunes, 2 de noviembre de 2015

Diez desafíos para consolidar una cultura empresarial familiar ganadora

Conozca los diez secretos del éxito en la longevidad de las organizaciones familiares, inspirados en estudios desarrollados en más de 25.000 empresas que han logrado superar la meta de los 100 años.

Es muy común encontrar grandes emprendedores que han logrado crear y desarrollar magníficos modelos de negocios que han sido exitosos financieramente hablando y que han logrado generar empresas grandes y exitosas, pero a la hora de hacer la sucesión, o demostrar el liderazgo familiar, son un enorme fracaso en el que la siguiente generación destruye o dilapida el patrimonio familiar a una velocidad increíble. 


¿Cómo cambiar esto? He diseñado un pequeño manual de cuáles son los diez principales atributos que debería tener una cultura empresarial familiar ganadora, si entendemos por cultura, el conjunto de valores, creencias y sobretodo comportamientos similares dentro de la familia o la empresa, que de alguna manera representa el marco de referencia, en la forma en que tomamos decisiones y actuamos frente a los retos cotidianos.

En este manual incluimos “los diez secretos del éxito en la longevidad de sus organizaciones“, partiendo del Modelo Serebrenik de la Consolidación de las Dinastías Familiares” -Dinastías Empresariales, Serebrenik G. Raúl-, e inspirados en estudios desarrollados en más de 25.000 empresas que han logrado superar la meta de los 100 años y en algunos casos, de empresas que han logrado sobrepasar los 200 y 500 e inclusive más de 1000 años, que compartimos con ustedes a continuación:

1. Tener un propósito claro

Todos los miembros de familia deben saber cuáles son los objetivos a alcanzar, “un sueño común”, así sabrán cómo contribuir al logro de estos objetivos y podrán enfocar sus energías y trabajo cotidiano para lograrlo.

2. Tener una comunicación efectiva  hacia adentro y hacia afuera

Un intercambio ágil de la información y de manera transparente, permite asegurar que se adoptarán oportunamente las decisiones correctas y no existirán dudas en los miembros del equipo respecto a qué deben hacer, cuándo, cómo y por qué.

3. Voluntad de aprender constantemente de nuestros antepasados y de los jóvenes de la familia

Cada proyecto de vida es una iniciativa única. Por ello es importante que los integrantes de la familia tengan voluntad de aprender nuevas técnicas o métodos para ser aplicados en los proyectos, si no, existirá la tendencia a repetir métodos de trabajo ya conocidos, los cuales no necesariamente serán los mejores o no lograríamos atender el ritmo de innovación que el entorno exige.

4. Trabajo  en equipo adentro y afuera

Para que los miembros de la familia se perciban como parte del equipo, trabajen o no en las empresas de la familia, es fundamental que cada uno de ellos tenga una participación activa. Los miembros de la familia no solo deben tener tareas específicas a realizar, sino que deben sentirse involucrados en la discusión de los problemas y en las decisiones que se adopten.

5. Solución de problemas y conflictos de manera constructiva

La dinámica del equipo debe tener una orientación a la solución de problemas y no a la búsqueda de culpables. Esto genera un ambiente de solidaridad y confianza que contribuye significativamente a la motivación de los miembros de la familia, que ello ocurra depende fundamentalmente del estilo de liderazgo que se desarrolle en la familia y en las empresas.

6. Búsqueda de la excelencia

No sólo en aspectos técnicos y en habilidades duras, sino  también en lo referente a las relaciones entre sus integrantes y las habilidades blandas que debemos desarrollar, la responsabilidad por el trabajo, la familia  y sus resultados.

7. Celebración de los logros comunes e individuales

La celebración de los éxitos alcanzados por el equipo es otro factor que contribuye a la motivación de los integrantes de la familia; cuando se alcanzan metas importantes, y si estos se han logrado con la calidad esperada, el celebrar este logro como equipo y familia hace que cada uno de los miembros sientan que ha contribuido a algo bueno e importante. Estas celebraciones son también una oportunidad para que el liderazgo familiar se destaque en forma especial a quienes han contribuido al éxito alcanzado más allá de lo esperado.

8. Equipos multidisciplinarios para problemas multidisciplinarios

Cuando el problema se relaciona con distintos ámbitos funcionales, como por ejemplo: finanzas, recursos humanos y operaciones, la búsqueda de una solución debe ser abordada por un equipo que incorpore representantes de las distintas áreas funcionales, para lograr una respuesta más integral.

9. Espíritu empresarial e innovador

El intercambio de ideas que se produce en un equipo multidisciplinario  innovador, genera nuevas formas de ver y solucionar los problemas o crear productos o servicios. Por ello un equipo de estas características es la mejor forma de innovar, de ejecutar proyectos y alcanzar las metas futuras. Si un proyecto se ejecutó, siempre de acuerdo a una determinada metodología, queremos buscar nuevas y más eficientes formas de llevarlo a cabo, la capacidad innovadora de un equipo es la mejor forma de hacerlo, la filosofía del Kaisen: todo es susceptible de mejorar, se aplica como anillo al dedo.

10. Gestionar o lograr comprometer a las siguientes generaciones con el legado familiar

El trabajo en equipo funcional de la generación mayor es el mejor ejemplo, para generar una cultura de continuidad. 

“El crear y desarrollar una cultura de éxito que permita la continuidad de las Empresas Familiares no es el trabajo fortuito de una generación, por el contrario es el esfuerzo de cada generación de manera permanente. No se trata de hacer grandes cambios, de lo que se trata es de incluir pequeños cambios de manera continua y permanente por generaciones

No hay comentarios.:

Publicar un comentario