Las buenas prácticas de reclutamiento superan la autosuficiencia

3. Las buenas prácticas de reclutamiento superan la autosuficiencia

Entender los detalles y matices de la industrial actual es crucial para que un reclutador se convierta en experto en la búsqueda de los perfiles adecuados para las vacantes. El monitoreo constante es otro punto a favor a la hora de publicar la oferta, y más si es en redes sociales. La investigación previa le brinda al seleccionador la capacidad de estar preparado a las contra preguntas de los candidatos.

4. No abandonar las estrategias tradicionales de difusión

Aunque en los centros urbanos se concentra una gran cantidad de trabajadores, ampliar la difusión de los mensajes es muy positivo en los casos de reclutamiento masivo o cuando se requiere un alto volumen de contratación. Para esto hay que conocer los canales que se manejan en las diferentes zonas de la región. En palabras de Cárdenas, “si lo que se busca es llegar a una población que no tiene un acceso óptimo a internet, hay que explorar los clasificados o los anuncios radiales; otra opción es contactar los puntos de encuentro de las comunidades. Estos esfuerzos resultan exitosos a la hora de llegar a aquellas personas con acceso limitado a la tecnología o que pasan poco tiempo en línea”.

5. Mantener el desarrollo y la retención de talentos

Mientras que un banco de talentos se puede estancar, una reserva de talento es una vía útil para que los empleadores siempre cuenten con empleados potenciales cualificados. “Una base de datos actualizada puede reunir a miles de candidatos”, asegura Cárdenas. “Algunas organizaciones están utilizando concentradores de talento como por ejemplo LiveHire de Australia, el cual crea un mercado en tiempo real que vincula directamente a Google con millones de hojas de vida digitalizadas y optimizadas, que logran una búsqueda efectiva”, agrega.