Expertos y líderes gremiales coinciden en que se necesitará, pero dicen que por ahora hay que tratar de salir de la crisis.
La pandemia del coronavirus y los bajos precios de petróleo están golpeando a la economía colombiana.
Un nuevo debate se encendió este lunes debido a la posibilidad de que el Gobierno Nacional presente una nueva reforma tributaria cuando se termine la incertidumbre que atraviesa el país. Esto por la prolongación que podrían tener los choques que actualmente están golpeando a la economía colombiana: la pandemia del coronavirus y los bajos precios de petróleo.
Dicha posibilidad fue puesta sobre la mesa por el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, al comentarlo en una entrevista con El Espectador.
Aunque desde que se hizo la tributaria pasada se sabía que los recursos allí recaudados no serían los suficientes respecto a los gastos de la Nación, expertos y líderes gremiales son conscientes de que llegará el momento de hablarlo, pues desde antes de la pandemia ya se veía venir, pero coinciden en que no es el momento para entrar en ese debate, pues la prioridad es salir de esta coyuntura.
Según Juan David Ballén, director de investigaciones económicas de Casa de Bolsa, desde la última tributaria se sabía que había un ‘hueco’ por la disminución de impuestos a las compañías, además de la inclusión de tributos de carácter social como la devolución del IVA. Agregó que si lo que se quiere es incentivar el consumo y que la gente tenga cómo afrontar la situación ahora y después de la coyuntura, hablar de una tributaria en estos momentos no sería lo más oportuno.
Andrés Pardo, exviceministro de Hacienda, explicó que si bien se abre la posibilidad de una tributaria, esta no llegará en este momento, porque en medio de la crisis subirle los impuestos a las empresas y a las personas es complejo porque todo el mundo se está afectando con la situación, pero añadió que cuando todo haya pasado, en ese entonces habrá que mirar “qué toca hacer para tener un futuro fiscal en los siguientes cinco o 10 años que sea sostenible y definir cómo vamos a pagar esa deuda que se está generando en estos momentos”.
Por su parte, Jaime Alberto Cabal, presidente de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco), aseguró que “es muy entendible la preocupación del Gobierno por los recursos y, por supuesto, los efectos que va a tener en los ingresos del Gobierno y también en los gastos por lo que dure el confinamiento y la recuperación, pero la verdad, nosotros pensamos que este tema en este momento no es oportuno plantearlo, ni tampoco conveniente”.
Cabal agregó que la moral y los ingresos de los empresarios y de la gente “que están viviendo este drama no son los mejores para recibir una reforma tributaria. Es un tema de otro momento, otro tiempo, por ahora debemos revisar cómo hacemos que las empresas sobrevivan (...) y luego miramos a ver qué queda para hacer una reforma”.
Además, enfatizó en que la atención debe enfocarse desde la parte de la salud en cómo aplanar la curva y prevenir el virus y desde el lado económico, cómo lograr preservar que sobrevivan las empresas y el empleo. Para Rosmery Quintero, presidenta de Acopi, gremio de las mipymes, “en estos momentos se deben tomar decisiones ágiles, para que cuando llegue el tiempo de la tributaria, que será necesaria, contemos con un tejido empresarial no tan fracturado frente a las situaciones que se han presentado”.
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